Un disparo en la barbilla el 4 de Abril de 1918 durante la Primera Guerra Mundial.
Causó que la mandíbula del paciente de 23 años de edad fuera destrozada con gran pérdida de tejido oseo por lo que fue imposible su recuperación, por suerte la lengua se salvó.
Rayos X en los que se aprecia la falta de la mandíbula inferior.
Se comienzan a crear injertos de piel en forma de tubo desde el pecho hasta la muñeca del paciente.
El trozo generado entre el pecho y la muñeca se trasplanta a la parte afectada.
Se intentó reconstruir la mandíbula desplazando injertos de piel en forma de tubo desde las partes sanas como el pecho y el cuello hacia el rostro del paciente.
Otra vista de como se empieza a utilizar tejido sano para llegar a la mandíbula y comenzar su regeneración generando un bloque con el que poder reconstruirla.
Todos los injertos se unifican en un único que se usará como base para reconstruir por completo la mandíbula.
La "masa de carne" comienza a tomar la forma de barbilla tras diverrsas intervenciones.
Resultado final, vista lateral.
Resultado final, vista frontal.
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